ESE LUGAR

   Ese lugar en el que el alma es libre. Un lugar que los ojos no alcanzan a ver, ni el cuerpo a sentir. Ese en que el viento apacigua, casi ipnotiza, y la tierra y el cielo se hermanan bajo calidas pinceladas de un dios menor.

   Ese lugar al que sin conocer, se ama. Un lugar que enamora con atormentados abrazos, lágrimas de nostalgia, y un intimo manto de verde vida.

   Ese lugar en el que la felicidad está en todo, y no se queda en deseo. Un lugar con fronteras de libertad. Un paraiso de bolsillo con aromas a eden.

   Ese lugar que está en mí, en tí, en ella, en todos. Un lugar al que hay que valorar, y del que hay que aprender a disfrutar.

   Un lugar con derechos de autor.

   Un lugar por redescubrir.

LOS SUEÑOS QUE SOÑÉ.

    Soñé que soñaba, y soñé...
    Una casualidad momentanea en un continuo sin fin.

    Soñé que soñaba, y soñé...
    Que el tiempo no era tiempo, y que nací.

     Soñé que soñaba, y soñé...
     Que la eternidad es un instante, el que viví.

     Soñé que soñaba, y soñé...
     Una verdad incierta, y otra, la que no pasa de mi naríz.

     Soñé que soñaba, y soñé...
     Que volé por encima de mi ignorancia, y fuí felíz.

MIS CORTOS

CORTO 1.
  
  Quien se implica desatiende lo que no abarca.

CORTO 2.

  Quien camina y camina nunca está el tiempo suficiente para ver lo que se pierde.

CORTO 3.

  Quien no se implica es como el viento que a todos acaricia pero a nadie quiere.Como una piedra ante la que multitud de seres pasan creando maravillas y regalando desgracias, y al igual que antes, despues se queda.

CORTO 4.

  No hay un unico camino para todos y cada uno, pero si hay caminos para todos y cada uno.O lo que es lo mismo, no hay mas destino que el que uno mismo se fabrica.

SE ENCIENDE EL FARO.

Necesito expresar, ¿peroqué? Decir, hablar, sacar todo lo que me mata en vida.

Estaría bien conocerme, descubrirme.
Al nacer comencé un camino con destino incierto (cierto... la muerte), lo realmente incierto es lo que pasará durante la travesía.
Me pasarán cosas antes las que no pueda hacer nada más que tener paciencia, resignación y una aptitud positiva. Ante el resto lo que yo decida será determinante, sobre todo y especialmente, si seré o no feliz.

Enfermamos nuestras vidas con nuestras decisiones, más allá de las consecuencias de hechos negativos y ante los que no habríamos podido hacer nada. Es paradójico pero no menos cierto, ya que como dije antes, las decisiones que tomemos en cada momento y faceta de nuestras vidas nos abocarán a una existencia u otra.